11/27/2006

El vicio de las series


Las películas ya no molan, ahora se llevan las series y hay algunas realmente adictivas. La primera y principal es Perdidos, una serie a la que estaba tan enganchado que me ponía a ver 1 capítulo y terminaba viendo 3 y 4 a las dos de la madrugada con el gusanillo de qué pasará (la primera temporada mucho mejor que la segunda). Otra a la que me aficioné fue Invasión (floja al principio pero con un crescendo argumental muy bueno). Con Mujeres Desesperadas no me atrevía y acabé viendo las dos temporadas seguidas casi de tirón. Y Prison Break, esta sí que es buena (ya me bajo la segunda temporada con los subtitulos en castellano). Y de House, qué voy a decir. La última a la que estoy viciado es Me llamo Earl, una surrealista comedia de la américa profunda. Las próximas serán la segunda temporada de Los 4400 y Blade. Y menos conocidas, aunque también recomendables, LAX, John Doe, Surface, Hustle (la movida), Epitafios y una que me pareció tremenda, Arrested Development (en la foto), una comedia sobre la familia freaky de un mafioso con unos personajes delirantes. El hijo mayor pone la cordura frente a sus hermanos el mago y la pija pobre, su hijo George Michael, su cuñado el actor penoso, su madre manipuladora...)

3 comentarios:

Anónimo dijo...

La mejor, Perdidos.
Y Prison Break adictiva como ninguna. A mi también me pasa lo de ver uno y no poder irme a dormir sin ver 3 más.
Me llamo Earl tiene momentos brutales pero es un poco blanda para lo divertida que podría ser.

Fernando López Mateo dijo...

Yo también añadiría "A dos metros bajo tierra", y eso que me perdí la mitad por culpa del fútbol...Si la tienes en DVD, Hang, me la pasas

Anónimo dijo...

Pues yo rindo pleitesía sin límites a Doctor en Alaska. Impagable, todo un clásico y además una influencia muy personal. Buenas noches, Cicely.